sábado, 28 de noviembre de 2009

Pequeño

Palabras predecibles, con un palpitar cerebral y ya no en el pecho, las mariposas danzan de forma violenta, mientras las hojas del árbol revolotea, la garganta se seca, los ojos se almidonan mientras la poesía se vuelve un grupo de letras vulgares y retorcidas, espasmos corporales, calor y una senzacion de ceguera, mientras los dedos hablan en lugar de su boca, piensa piensa piensa pequeño, en que mundo te has metido, lleno de complicacion, egoísmo, pasiones bajas, nombres revoloteando en tu cabeza, en que mundo te has metido pequeño, en un mundo adulto y mundano, en donde el amor no significa nada y tu decapitacion sera inminente.....

1 comentario:

Rocío Gress Carrasco dijo...

El letrero tenía palabras ilegibles ¿por la tempestad o el llanto? La distancia nunca había sido tan concreta, el agua tan salada en el rostro, la palabra tan contundente… Quizá muy mala la tarde, quizá muy mala la vida. No es junto, viajero adolorido, denigrar la poesía con enunciaciones baratas. La poesía nunca son palabras, mucho menos vulgares, vulgar el que las condena a las letras… retorcidas, todo lo que quiera. La poesía no la entiende cualquiera, no la ama cualquiera, no la hace y no la provoca cualquiera (vulgaris). La poesía es magia, está en el aire, en los sonidos, en los respiros, en la luz, en la oscuridad… las palabras son la más mundana manera de querer aprehender lo que pocos tienen el privilegio de poseer. Cuando la coraza se rompa, cuando decida romper la coraza, entonces el pulgarcito caerá en su grandeza, no antes. Si el vagamundos, no es capaz de transformar su dolor en poesía, no se vale que denigre el poder de los sueños…